La Sandunga en el Bicentenario: Apropiación de un son istmeño por la industria televisiva.
Capítulo 1. Organización y Conmemoración

Sinopsis

La presente investigación es un estudio en el cual se demuestra que la versión de La Sandunga interpretada en el escenario del Ángel de la Independencia el 15 de Septiembre de 2010, en el marco de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución Mexicana, responde a una apropiación del son istmeño homónimo hecha por la industria televisiva como parte del uso político e ideológico en el que se construyó un discurso nacionalista con base en la música tradicional mexicana.

La metodología empleada para lograr el objetivo dicho consistió en comparar la versión de La Sandunga bicentenaria con las versiones compiladas en las ciudades del Istmo de Tehuantepec, como resultado de un trabajo de campo llevado a cabo ex profeso para esta investigación. Asimismo, esta tesis demuestra que La Sandunga bicentenaria forma parte de un imaginario simbólico resignificado por un discurso nacionalista de carácter oficial.

Introducción

La presente investigación tiene sus orígenes en un interés personal por desarrollar, a partir de conceptos pertenecientes a la teoría crítica, las relaciones que se establecen entre el devenir histórico y los discursos históricos que detenta el poder, tomando como motivo para dicho propósito, la problematización de la versión de la pieza tradicional mexicana La Sandunga, interpretada por la Orquesta Filarmónica de las Américas (en adelante OFA) en el escenario del monumento al Ángel de la Independencia el 15 de Septiembre de 2010, con motivo de la conmemoración del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución Mexicana. Con ello se sustenta la tesis que afirma que dicha versión responde a una apropiación del son istmeño homónimo hecha por la industria televisiva como parte del uso político e ideológico que tuvo por objetivo crear un discurso nacionalista con base en la música tradicional mexicana.

Como marco teórico de la presente investigación, consideré como referencias principales las siguientes:
A) El orden del discurso, de Michael Foucault. De esta lección inaugural se extrae el concepto de “Voluntad de verdad”. Sistema de exclusión relacionado intrínsecamente con los usos del discurso a través del cual se establecen diferenciaciones entre dominantes y dominados, siendo este concepto el que subyace como base de la presente investigación.

B) Naciones y nacionalismos desde 1780, de Eric Hobsbawn. En este libro se retoma el discurso decimonónico de “nación” en el cual la voluntad de verdad se impone para justificar la existencia de esquemas geopolíticos contingentes, que en el devenir histórico responden a esquemas geopolíticos construidos con base a los intereses de pequeños grupos de poder.

C) El perfil del hombre y la cultura en México, de Samuel Ramos. De este ensayo se rescatan criterios que al ser complementados con las obras de
José Luis Martínez Rodríguez y Octavio Paz, ayudan a determinar con mayor precisión la evolución del nacionalismo en México.

D) Los grandes momentos del indigenismo en México, de Luis Villoro. En esta obra se recuperan las disertaciones que giran en torno a las disyuntivas que atraviesa el mestizo mexicano por establecer los rasgos identitarios de un nacionalismo floreciente, así como el lugar que ocupa el indigenismo a partir de estas nuevas valoraciones.

E) El Sentido social del gusto, Elementos para una sociología de la cultura, de Pierre Bourdieu. De esta compilación de artículos se extraen las
aportaciones del apartado titulado “campo de las instancias de reproducción y de consagración del arte”, en el cual se establecen cuáles son y cómo operan los distintos sistemas objetivos de exclusión y legitimación de los bienes simbólicos, dentro de los cuales el Estado ocupa un papel preponderante.

La primera parte del presente trabajo consiste en el análisis del contexto social y político que atraviesa México en vísperas de la fiesta bicentenaria considerando los recursos humanos y financieros empleados para dicho festejo. De igual forma, y a manera de ejemplo, se realiza una retrospectiva histórica de monumento al Ángel de la Independencia en la que se da cuenta de la evolución de su arquitectura, así como su importancia dentro de la vida cultural citadina como símbolo legitimado y legitimador de las más importantes manifestaciones culturales del siglo XX y XXI. Por último se realiza el análisis musical y televisivo de La Sandunga versionada por la OFA, mediante el cual se extraen los elementos para contrastar dicha versión con las versiones provenientes de la tradición popular así como para establecer las bases para el desarrollo del capítulo titulado Medios de comunicación, poder y tradición.

La segunda parte consiste en el análisis de las distintas fuentes consultadas en las que se estudia la aparición de La Sandunga en México. Posteriormente se establecen algunas hipótesis en torno a la rápida extensión de su popularidad en el istmo oaxaqueño y las causas que responden a su posicionamiento como símbolo de identidad regional. Para concluir se realiza un estudio de los orígenes de La Sandunga andaluza con el fin de establecer una relación entre esta y La Sandunga tehuana, dibujando así una línea mediante la cual sea posible observar la mutación de esta última hacia una forma musical con características propias, de la cual se elabora su análisis formal con el propósito de ser contrastada con La Sandunga bicentenaria.

La tercera parte consiste en la problematización de los orígenes del nacionalismo en México y los factores por los cuales La Sandunga devino en un símbolo de identidad nacional. Finalmente se ensaya sobre los orígenes de la industria televisiva en México, así como su empoderamiento y simbiosis con el Estado cuyas repercusiones han sido entre otras, la apropiación, objetivización y promoción de bienes simbólicos nacionales como La Sandunga, usados por el poder toda vez que éste pretende resignificar la historia por medio de la ritualidad de los actos conmemorativos que ostenta.

Nuestra pobreza puede medirse por el número y la suntuosidad de nuestras fiestas populares
Octavio Paz

En el presente capítulo que versa sobre la organización y conmemoración de La Sandunga en el Bicentenario, se realiza una descripción del marco histórico por el que atraviesa México hacia el año 2010. Este se basa en un análisis personal,el estudio de la programación perteneciente a la industria televisiva y el estudio de la información proporcionada por la prensa de la época.

La Sandunga en el Bicentenario. Organización.

La conmemoración del Bicentenario de la  Independencia y el Centenario de la Revolución Mexicana fue una  asignatura  obligada  en la agenda del Estado  presidido por el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa.

Las fiestas llevadas a cabo a lo largo de todo el país durante los días 15, 16 y 17 de septiembre de 2010 son el pináculo de una estrategia puesta en marcha por el  gobierno federal desde el año 2007 para -so pretexto de conmemorar las fiestas patrias- obtener beneficios económicos mediante el otorgamiento de prebendas a particulares a través del nepotismo; enajenar  a los mexicanos con el tema del bicentenario a través de los medios masivos de comunicación, continuar perpetuando a través de éstos la historia de bronce  y construir para México la imagen de un país próspero  ante la comunidad internacional.

Desde el año 2008, algunas carreteras y calles de algunas ciudades de la república comenzaron a inundarse de señalizaciones con el mote “Ruta 2010”, para rendir homenaje a los sitios conmemorativos de la lucha independentista y revolucionaria. A estas acciones le siguieron en algunos estados la restauración de inmuebles históricos, la expropiación de propiedades con vinculaciones históricas, la creación y adquisición de obras plásticas, así como la  planificación y construcción de monumentos y obras públicas, algunas de ellas benéficas para los ciudadanos, otras inconclusas y unas más excesivamente costosas e innecesarias bautizadas en su mayoría con el mote de “bicentenarias”1.  

Autopista Guadalajara-Ciudad Guzmán, Jal.
Señaletica con el mote Ruta 2010.
Fig.1 Autopista Guadalajara-Ciudad Guzmán, Jal. Señaletica con el mote Ruta 2010.

Ejemplo de ello son las Torres Bicentenario. Toluca 150 millones de pesos; El Parque Bicentenario. Querétaro; 500 millones de pesos; El Águila Bicentenaria. Tamaulipas, 20 millones de pesos; La Ciudad Jardín Bicentenario. Edo. de México,3 mil 900 millones de pesos. pesos

Las Torres bicentenario, Toluca de Lerdo, México. Foto por Octavio Alonso Maya.
Fig.2. Las Torres Bicentenario, Toluca.
Parque Bicentenario de Querétaro. Foto por Jassicatena.
Fig.3. Parque Bicentenario de Querétaro
El Águila Bicentenario, Tamaulipas. Foto por Enrique Carbajal.
Fig.4. Águila Bicentenario, Tamaulipas.

A lo largo de la organización y conmemoración del Bicentenario de la Independencia, transnacionales y Pymes incrementaron sus ganancias mediante el empleo de esta temática. De acuerdo a los datos estimados por la Confederación Nacional Turística (CNT) y La Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope)2., los consumidores contribuyeron a una derrama económica estimada en 4 mil millones de pesos durante la semana comprendida entre los días 13 y 19 de septiembre.

La empresa Televisa, por su parte, concluyó en el mes de septiembre con dos programas de temática histórica; Gritos de Muerte y Libertad y Héroes de Carne y Hueso. La primera, una novela  transmitida por el canal 2 en horario estelar, la segunda, una serie documental coproducida por Clío TV  transmitida por Canal 5 en horario de audiencia baja y la cual contó con la colaboración del historiador Enrique Krauze y algunas estrellas de talla internacional como el actor Gael García Bernal3.

Finalmente, bajo una estrategia de marketing de dos años y la consolidación de las prebendas acordadas, el Estado llevó a cabo los días 15, 16 y 17 de septiembre la conmemoración del bicentenario de la independencia y centenario de la revolución mexicana bajo un país cooptado por el racismo, la violencia del narcotráfico, el desempleo, la pobreza extrema y la dependencia económica norteamericana.

Para la realización de la conmemoración del bicentenario de la independencia se estimó la participación de 52 mil funcionarios y dependencias entre las cuales se contaron el Poder Legislativo, el Gobierno del Distrito Federal, la Secretaría de Educación Pública y la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF).

El monto al que ascendió  la conmemoración del bicentenario de la independencia de acuerdo a cifras oficiales  fue de  2 mil 971 millones 600 mil pesos de los cuales se erogaron 19 millones 253 mil 656 pesos a la ceremonia de exhumación de los restos de 12 héroes de la independencia; 16 millones 373 mil 706 pesos en el lanzamiento del programa transmitido por Televisa; 1 millón 567 mil 440 pesos en la colocación de la primera piedra del monumento conmemorativo del bicentenario; 1 millón 567 mil 440 pesos en el espectáculo multimedia en Palacio Nacional, durante el Grito de Independencia; 123 millones 982 mil 774 pesos en el proyecto ganador para construir el Arco del Bicentenario, a cargo del arquitecto César Pérez Becerril; 140 millones 870 mil pesos para la adquisición  de obras de arte (dos colecciones de la independencia y de la revolución para la exposición México 200 años en Palacio Nacional; 1 millón 881 mil pesos para la compra de una vajilla de Talavera poblana diseñada por Katia Ramírez Romero empleada para la cena del día 15 en Palacio Nacional; 580 millones de pesos para la realización del magno espectáculo del 15 de septiembre, así como  los recursos otorgados a cada uno de los estados y las distintas actividades  llevadas a cabo en distintos puntos de  la capital del país.


Morelia Michoacán México 21 de Diciembre del 2009. El Presidente de los Estados Unidos Mexicanos Lic. Felipe Calderón Hinojosa, en la Ceremonia de Conmemoraciön del Bicentenario de la Conspiracion de Valladolid.
Foto: Alfredo guerrero
Fig.5. Felipe Calderón Hinojosa, en la Ceremonia de Conmemoraciön del Bicentenario de la Conspiracion de Valladolid.

De acuerdo a los datos reportados por la Secretaria de la función Pública (SFP) en su Portal de Obligaciones de Transparencia (POT), el monto erogado del año 2007 a septiembre de 2010 ascendía a mil 177 millones 567 mil 894 pesos4.

En la víspera de la conmemoración del bicentenario de la independencia el gobierno federal lanzó una campaña a través de la página Web oficial de gobernación, radio y televisión para persuadir a los ciudadanos de presenciar la fiesta bicentenaria desde sus hogares con el propósito de acotar a menos de 60,000 personas la asistencia a la Plaza de la Constitución donde se llevaron a cabo los números de multimedia y pirotecnia.

Los empleados del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Acción Nacional, mandos medios y superiores del Gobierno federal y legisladores enviaron solicitudes de acceso al Zócalo junto con sus datos personales y los de sus familiares, a las oficinas de logística de la Presidencia de la República y de la Secretaría de Educación Pública desde el mes de agosto para ocupar un lugar en la Plaza de la Constitución. A diputados federales, directores generales e incluso subsecretarios de Estado que no pertenecían a la facción política del PAN se les invitó con tres semanas de anticipación a tramitar una  pulsera  de edición  limitada que sería el distintivo de acceso automático a la plancha del zócalo capitalino.

De acuerdo al testimonio de funcionarios y legisladores, también se hizo distinciones entre el grupo selecto de panistas invitados quienes portaron pulseras de tela de color verde, con la leyenda “México 2010”, y otros, pulseras plásticas de color dorado para tener acceso a una zona exclusiva.

El resto de los lugares fueron destinados para un mínimo porcentaje de ciudadanos cuyo acceso se pagó con la espera en largas filas formadas desde las 8:00 horas en los diversos accesos al Zócalo, los cuales fueron equipados con detectores de metales y grupos de policías federales con órdenes de realizar inspecciones minuciosas.

 Edificios del Distrito Federal en el Zócalo de la Ciudad de México vista desde el restaurante de la azotea del Hotel Majestic con parafernalia festiva  del Bicentenario,
Fig. 6. El Zócalo en víspera de los festejos.

En el primer cuadro de la ciudad se realizaron anticipadamente cierres vehiculares en las inmediaciones del Centro Histórico y Paseo  de la Reforma donde se localizan los monumentos de La Diana Cazadora y el Ángel de la Independencia. De igual forma, se reforzó la vigilancia en las sedes de dependencias federales como la Procuraduría General de la República, la Comisión Federal de Electricidad, la Torre de Petróleos Mexicanos, la Secretaría de Desarrollo Social, la Secretaría de Gobernación, así como el Senado de la República.

El personal empleado para los operativos de vigilancia y prevención a lo largo de todo el país ascendió a más de 25 mil agentes federales, así como elementos de las Fuerzas Federales de Apoyo y de Operaciones Especiales, batallones de infantería, Ejército, Marina, efectivos del Estado Mayor Presidencial (EMP), perros entrenados, elementos vestidos de civil, fusileros paracaidistas, personal experto en explosivos y grupos de francotiradores. En el Distrito Federal se planeó el despliegue de 4 mil policías federales, y un número similar de militares. Los estados que concentraron el grueso de los efectivos fueron Sinaloa, Chihuahua, Sonora, Nuevo León, San Luis Potosí, Morelia, Guerrero, Puebla, El Estado de México y el Distrito Federal. Entre los dispositivos empleados por dicho personal se encontraron cartuchos de gas lacrimógeno, armas largas y detectores de explosivos.

A lo largo del recorrido: Paseo de la Reforma, Avenida Juárez, y Plaza de la Constitución se establecieron 45 pantallas gigantes, 82 cámaras fijas, cien unidades móviles, cuatro de audio, cinco estaciones terrestres, grúas y un helicóptero.

En el Paseo de la Reforma se erigieron escenarios hechos con base en estructuras metálicas, entarimados y sistemas de audio, iluminación e imagen de vanguardia que albergaron a los distintos cantantes y conjuntos musicales, quienes tuvieron por escenarios El caballito, y los monumentos del Ángel de la Independencia y Cuauhtémoc.

 Los distintos números presentados a lo largo del desfile; Independencia, Revolución e Insurgencia, Prehispánico, Colonia y Barroco, Héroes y Mitos, La Gran nación mexicana, Cultura popular, Suave Patria, Celebración de muertos así como los espectáculos  Árbol  de la vida,  Vuela México y El coloso estuvieron a cargo de  los creadores  Jorge Vargas,   Juan Carlos Canfield, Juliana Faesler, Mónica Raya, Claudio Valdés Kuri, Alicia Sánchez, Horacio Lecona, Felipe Fernández del Paso y Pedro Friedeberg respectivamente.

El tema musical principal que acompañó los distintos segmentos fue El futuro es milenario5, compuesto por los músicos Aleks Syntek y Jaime López. El espectáculo multimedia en Palacio Nacional, así como el de pirotecnia fueron llevados a cabo por el australiano Richard Birch y el francés Christophe Berthonneau, respectivamente (Anexo A).

En la víspera de la conmemoración del bicentenario de la independencia, el presidente Felipe Calderón ofreció una cena en el Castillo de Chapultepec en donde se dieron cita numerosos personajes de la política nacional, extranjera y otros. Entre ellos se encontraron los presidentes de Colombia y Guatemala, Juan Manuel Santos y Álvaro Colom; los empresarios Carlos Slim y Roberto González Barrera; los presidentes de la cámara de senadores y diputados Manlio Fabio Beltrones y Jorge Carlos Ramírez; el príncipe Philippe de Bélgica; el ex Primer Ministro del Reino Unido, John Mayor; el Vicepresidente de Nicaragua, Jaime Morales Carazo; la gobernadora de Canadá, Michaelle Jean, el Primer Ministro de Kuwait, Nasser Al- Mohammed Al – Ahmed así como representantes de la República Árabe Saharaui Democrática, Georgia, Las Bahamas, San Vicente y Las Granadinas, San Cristóbal, Belice y República Dominicana.

En esta reunión, Felipe Calderón destacó que el gobierno mexicano había estado enfrentando desafíos globales como “el crimen organizado transnacional, que amenazaba la paz y la democracia de nuestros países”.  Así mismo, reiteró que México ha construido “con esfuerzo, con trabajo, con tesón, con muchos sacrificios una democracia en la que hoy vivimos” además de ser un país con una economía sólida y en crecimiento, con un compromiso serio con la justicia social y el desarrollo6.

Al término de este discurso los invitados presenciaron un espectáculo a cargo del cantante Pepe Aguilar, el Ballet Folklórico de Amalia Hernández, el flautista Horacio Franco y el Ensamble de arpas de América de Celso Duarte.

Desde las primeras horas del 15 de septiembre de 2010 se dio comienzo a numerosos actos para la conmemoración del Bicentenario de la Independencia. Algunos de ellos fueron presididos por facciones oficiales como la Cámara de Diputados y la del Gobierno del Distrito Federal y algunas otras independientes como la del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).

La Sandunga en el Bicentenario. Conmemoración

La celebración comenzó al filo de las 16:30 horas con la representación del ritual prehispánico del Fuego Nuevo en la plaza de la constitución y continuó a las 17:45 horas con un carnaval que partió del Paseo de la Reforma en dirección al Zócalo de la ciudad de México.

En éste participó el trabajo de mil 200 artesanos, 7 mil voluntarios y 27 carros alegóricos distribuidos en 9 segmentos o temáticas: Independencia, Revolución e Insurgencia, Prehispánico, Colonia y Barroco, Héroes y Mitos, La Gran nación mexicana, Cultura popular, Suave Patria y Celebración de muertos.

Cada una de estas unidades móviles se hizo acompañar de diversos conjuntos musicales provenientes de diversos estados de la república, así como de equipos de audio integrados que dejaban escuchar el tema oficial del Bicentenario titulado El futuro es milenario en sus distintas versiones: cumbia, mambo, ranchero, son, bolero, danzón y  cha-cha-cha.

Cada una de estas versiones escenificadas en siete carros alegóricos distintos tuvieron como representantes -entre otras- a las cantantes y bailarinas Tongolele, Daniela Romo, Bianca Marroquín, Regina Orozco, Lila Downs, Eugenia León, Heidi Infante y Nieffe Peña.

El desfile incluyó representaciones de oficios, grupos raciales, así como personajes del pasado mítico-histórico tales como Quetzalcóatl o Kukulkán por mencionar algunos.

Posterior al carnaval, hacia las 20:00 horas, se dio inicio a numerosos conciertos simultáneos que tuvieron como escenarios el Paseo de la Reforma, el Ángel de la Independencia, el monumento a Cuauhtémoc, y el Zócalo. En ellos  participaron los cantantes Espinoza Paz, Lila Downs, Eugenia León,  Ely Guerra, Denisse Lo Blondo, Guadalupe Pineda, Natalia Lafourcade, Paulina Rubio, Pambo, Armando Manzanero, DJ Alyosa Barreiro, Aleks Syntek, Gustavo Galindo, Jaime López,  Erick Rubin, Ángel Ruiz – finalista del concurso Ópera Prima-, así como las agrupaciones Jotdog, Instituto Mexicano del Sonido, Zoé, Kinky, Maldita Vecindad, la OFA, Los Tigres del Norte y algunos conjuntos locales como los mariachis Charanda y Alazanes, Clown, Arpa Grande y La Cornisa.

 Columna de la Independencia (El Angel) despues del Grito del Bicentenario
Fig.7. Columna de la Independencia (El Angel) despues del Grito del Bicentenario

Al noroeste de la ciudad en el Auditorio Nacional, el cantante Fernando de la Mora interpretó un concierto acompañado de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes y el mariachi Gama Mil un repertorio que incluyó piezas de Agustín Lara, Pedro Infante y Álvaro Carrillo.

En víspera de la ceremonia del Grito de Independencia se presentaron en la Plaza de la Constitución los espectáculos Árbol de la vida, El Coloso y Vuela México. De forma simultánea en la plaza de las Tres Culturas, el excandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador encabezó una ceremonia del grito de independencia alternativa.

A las 23:00 horas dio inicio la ceremonia del Grito de Independencia. Entre los invitados a Palacio Nacional se observaron numerosos personajes de diversos ámbitos de la vida nacional: los ex presidentes Carlos Salinas de Gortari y Vicente Fox, la ex primera dama Martha Sahagún, la presidenta de Costa Rica Laura Chinchilla, el empresario Carlos Slim, el futbolista Cuauhtémoc Blanco, el luchador El hijo del Santo, el boxeador Finito López, el comediante Roberto Gómez Bolaños “Chespirito”, la actriz Carmen Salinas y la Miss universo 2010, Jimena Navarrete.

El grito de Calderón en Palacio Nacional en 2010.
Fig. 8. El Grito de Calderón en Palacio Nacional.

Concluido el grito comenzó un espectáculo de luz, sonido y pirotecnia al que le siguió un concierto ofrecido por los Tigres del Norte y Armando Manzanero en los escenarios del Ángel de la Independencia y la Plaza de la Constitución respectivamente, números que concluyeron hacia las 2:00 horas del día 16.

Los festejos no sólo tuvieron como escenario el primer cuadro de la ciudad, a él se sumaron las delegaciones, Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Miguel Hidalgo, Iztapalapa, Gustavo A. Madero, Tlalpan así como  diversos municipios del  Edo. de México como Toluca, Ecatepec y Atizapán.

Mientras tanto en ciudades como Dolores Hidalgo, Monterrey, Tampico, Matamoros y Nuevo Laredo el grito se llevó a cabo bajo fuertes dispositivos de seguridad. En Ciudad Juárez y ocho municipios más del estado de Chihuahua, se suspendió el grito por motivos de seguridad, lo mismo ocurrió en Oaxaca, donde se suspendió en veintiséis alcaldías debido a la agudización del problema agrario de la zona que devino en la toma de los palacios municipales.  

En el resto de la república mexicana y el mundo la conmemoración del bicentenario de la independencia adquirió distintos matices. Los mexicanos en el extranjero se agolparon en algunos lugares emblemáticos de las ciudades de Buenos Aires, Barcelona, Berlín, París, Roma, Shangai, Washington y Las Vegas en donde personajes como el actor Gael García Bernal y la Secretaria de Estado Norteamericana Hillary Clinton presidieron la ceremonia del grito de independencia. Edificios como el Empire State de Nueva York y monumentos como el obelisco de Buenos Aires fueron iluminados con los colores de la bandera nacional.

Como puede observarse, los recintos en los cuales fueron llevadas a cabo las actividades conmemorativas de mayor importancia para el Estado, se ubican tanto en las inmediaciones como dentro  del corredor urbano  del Paseo de la Reforma, lugar que al paso del tiempo ha condensado las más fastuosas piezas arquitectónicas del poder, entre ellas, el monumento al Ángel de la Independencia, el cual se ha convertido, desde mediados del siglo XX, en escenario central de diversas actividades y manifestaciones, haciendo de ella uno de los referentes históricos de mayor importancia.

Notas.

  1. Juan Pablo Becerra Acosta, “El festejo, un pretexto para rebautizar obras”, Milenio, Al frente, México, D.F., 15 de septiembre de 2010, pp. 4 – 5. ↩︎
  2. De acuerdo a los datos estimados por la Confederación Nacional Turística (CNT) y La Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope). Enrique Hernández, “Por puente, turistas gastarán 4 mil mdp”, Milenio, Negocios, México, D.F., 15 de septiembre de 2010, p.17 ↩︎
  3. Álvaro Cueva, “Ecos del bicentenario”, Milenio, Hey, México, D.F., 16 de septiembre de 2010, p.3 ↩︎
  4. Elizabeth Velasco C., “La fiesta costará a los mexicanos casi 3 mil mdp”, La Jornada, Editorial, México, D.F., 15 de septiembre de 2010, p.6 ↩︎
  5. www.youtube.com. https://www.youtube.com/watch?v=JjjPwIL6afQ. Fecha de consulta: 18 de octubre de ↩︎
  6. Lorena López, “Cena Calderón con invitados distinguidos en el castillo”, Milenio, Al frente, México, D.F., 15 de septiembre de 2010, p.4 ↩︎

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